martes, 31 de agosto de 2021

 SE ACABARON LOS TOROS...

…Y quedamos los “bobos”. Este dicho acuñado y muy utilizado en Fermoselle, y desde hace unos años casi en desuso, viene a expresar de una forma muy significativa lo que ocurre en gran parte de las familias una vez que finalizan las fiestas patronales del mes de agosto.


Fermoselle siempre fue un pueblo castigado por la emigración de sus gentes al extranjero y a las zonas más industrializadas de España y encabezaba en la provincia de Zamora  lo que ahora de forma muy eufémica se llama la “España vaciada”. Y eso se nota con claridad durante estos días en los que la mayoría de las viviendas, ocupadas durante el periodo vacacional agosteño cierran sus puertas porque sus propietarios deben regresar a sus domicilios. Fermoselle pasa de un plumazo de los seis o siete mil habitantes a los escasamente mil doscientos que residen habitualmente en la Villa.

Esta experiencia un tanto traumática y triste se expresaba muy acertadamente con ese dicho popular: “se acabaron los toros y quedamos los bobos”. No es que los fermosellanos  residentes dedicaran ese calificativo de forma despectiva hacia sí mismos. No. Lo que pretendían era poner de manifiesto que el curso laboral se iniciaba de inmediato y sus hijos tenían la obligación  de partir hacia sus puestos de trabajo y alejarse cargados de nostalgia hasta un nuevo año. Constituía un símbolo de partida, de despedida, de lágrimas que resbalaban por los rostros un tanto desencajados de los que se iban y de los que se quedaban, acompañando a los abrazos que parecían eternos. Todo este ritual, ¡melancólico ritual!, se convertía en un “hasta los toros”, otro dicho, en este caso  esperanzador, que intentaba romper con la escena anterior.

Para que nos hagamos una idea de esta especie de éxodo anual, en la década de los 70 y 80 las empresas concesionarias de viajeros desde Fermoselle fletaban varios autocares que repletos de fermosellanos viajaban hasta el País Vasco, Cataluña e incluso hasta Alemania y Suiza. Hoy eso ha desaparecido gracias a la generalización de los automóviles.

Así pues, la sensación de soledad y silencio que se produce a partir de estos días festivos, lo mismo ayer que hoy, se mantiene y pervive en el corazón de los fermosellanos. Sus calles y rincones vuelven a la paz y al sosiego que se respira durante todo el año. La vida sigue en Fermoselle. Lo dicho: “Se acabaron los toros y quedamos los bobos.” Feliz regreso a vuestros hogares.

domingo, 29 de agosto de 2021

 FIESTA DE LA VENDIMIA EN

“FERMOSELLE, VILLA DEL VINO”


Aunque los babos  (grano de uva de un racimo) engordan y maduran en los Arribes la plaza mayor de Fermoselle recibió la Fiesta de la Vendimia 2.021. Buena iniciativa de que no coincida con los trabajos de la recolección pues sería complicado para los cosecheros y vendimiadores poder alternar sus labores con las actividades propias de este evento.


La organización y el patrocinio corrió a cargo de la AECT Duero-Douro con la colaboración del ayuntamiento. Ha sido un día dedicado de pleno a la vinicultura y a las tradiciones de Fermoselle, Villa del Vino. Degustación de hornazos y vinos de la denominación, catas, visitas a las bodegas tradicionales fueron algunas de las actividades más destacadas todas ellas aderezadas con la musica y los bailes de grupos folclóricos.

A media mañana la responsable de Agricultura en Zamora de la Junta, las autoridades locales y los responsables de Douro-Duero y Denominación Arribes dieron el pistoletazo de salida a la fiesta. Enseguida las diferentes carpas montadas en torno a la plaza se fueron llenando de gentes con ganas de saborear los vinos elaborados por algunas de las bodegas comerciales establecidas en la Villa. La bodega Cooperativa, bodega Pascual Fernández, bodega Almaroja, Bodega Pastrana, entre otras, ofrecieron gratuitamente sus vinos para el bien del paladar de visitantes.


Igualmente se presentaron las diferentes  variedades de uvas de los arribes rematando con una cata dirigida por Carlos Capilla, director técnico de la D.O Arribes. El aforo de 70 personas quedó pequeño para el número que deseaban participar activamente. Un vino blanco , un tinto y un rosado fueron descritos con mucha claridad y precisión por el director técnico mientras los catadores se esforzaban para distinguir los diferentes colores, olores y sabores del producto.


La jornada de la mañana, bajo un sol de justicia, se cerró con la actuación del grupo de jotas El Majuelo, de Salamanca.


La sesión de la tarde se presentaba con buenas espectativas. A las 6 de la tarde el grupo de Tamborileros de Fermoselle encabezaron la comitiva hacia la zona del Teradillo donde se pudieron visitar algunas de las bodegas tradicionales de producción familiar. Montero, Toño Villarino, Raúl, Vila, abrieron las puertas de sus lagares para los visitantes que salían asombrados ante los tesoros que se ocultan en estas edificaciones. Aquí folclore y vino se fundieron  en un acto de amor que será difícil de olvidar por las decenas de participantes,casi todos foráneos.


En un rápido pasacalles los tamborileros fueron invitando a los vecinos a acercarse hasta la plaza para vivir uno de los momentos más esperados del día. Avanzada la tarde y cumpliendo con el horario aparecieron por la calle Portal del Villar el carro cargado de varios esnales abarrotados de uvas y la mula (la única que perdura en Fermoselle) especialmente jaezada para la ocasión conducida por Jose, su amo,  y sus ayudantes  que abriendo camino entre el numeroso público se posicionaron en el centro de la plaza para vaciar los esnales en un par de baños de madera. Enseguida comenzó el pisado tradicional de la uva con intervención de niños y mayores que arrancaron los aplausos de una plaza abarrotada de gente. ¡Qué recuerdos para los mayores y qué novedad para los más jóvenes!


Cuando atardecía el grupo local de danzas “Juan de la Encina” ofreció un recital de bailes, cánticos y brindis que deleitaron a quienes llenaban terrazas y espacios, recibiendo el agradecimiento y el cariño de todos.



Se cerró la jornada con la cata del primer mosto de la cosecha 2021 con el Alcalde y el director general de  AECT Duero-Douro mientras que continuó la oferta de los diferentes vinos a quienes aguantaban el tirón.

Eran las 11 de la noche cuando se corría el telón de esta primera Fiesta de la Vendimia que tan buen sabor de boca ha dejado a fermosellanos y turistas. Suerte y gracias a organizadores (ya piensan y trabajan de cara a la de 2022), patrocinadores y colaboradores por este día tan especial dedicado a uno de los productos más destacados y excelentes de Fermoselle, Villa del Vino.


 

sábado, 28 de agosto de 2021

 SAN AGUSTÍN SE QUEDA SIN CELEBRACIONES PROFANAS

Todos sabemos que el patronazgo en el que recaen las ferias y fiestas de Fermoselle  es San Agustín. Para quien no sea así recogemos lo que aparece en el programa de Ferias y Fiestas Fermoselle “San Agustín” 2021 en su último apunte: ”Día 28 de agosto, Día de San Agustín, 12:00 h. Misa Mayor en honor a nuestro Patrón. Lugar:Iglesia Parroquial”.


Desconozco la relación del obispo de Hipona con Fermoselle para que en una época lejana, quien fuera el creador de esa titularidad, ofreciera la oportunidad que santo tan sabio figurara con letras de molde en las cabeceras de los diferentes programas que se editan para dar a conocer los festejos. Tal vez, tirando de la lógica, como hasta hace años las fiestas recaían en el último fin de semana del mes de agosto, pues el día 28, fecha del fallecimiento producida en el 430, siempre se encontraba dentro de la semana festiva. Verdad es que nunca se le ha tenido muy presente puesto que no se han ofrecido actividades en torno a su  figura, a excepción de la fiesta religiosa.

Ahora  bien, lo que es difícil de entender es que el día  de San Agustín pase con más pena que gloria quedando casi en el olvido de los fermosellanos.

Teniendo en cuenta que ya no se le permitió salir de la parroquia en procesión para acompañar a la Virgen de la Bandera el domingo correspondiente al anterior al “domingo de Toros”, debido a las restricciones impuestas por las autoridades sanitarias a causa del covid-19; que no se ha podido entonar el cántico (A San Agustín pedimos…) ante su hornacina de la capilla en la calle Requejo antes de iniciar los encierros infantiles y que llegada su fecha de onomástica se le deje a un lado, vamos a tener que renombrarlo como “el santo que se quedó prácticamente sin día festivo”

Pensamos que San Agustín, por el mero  hecho de ser nuestro patrón particular, merece que se celebren en su honor y con todo el boato del mundo  unas  actividades acordes  a su categoría. Que esa fecha se llene de agasajos a su figura y se trasforme en  uno de los días con más atractivo e importante de las ferias.

Por ello, desde esta página reivindicamos y pedimos a quien corresponda que tengan en cuenta a nuestro santo a la hora de elaborar el programa de fiestas, o de lo contrario lo “borren” de inmediato de los titulares que se le dedican cada año por agosto.

No obstante, nos queda la posibilidad de acompañarle durante la eucaristía que se oficia en la iglesia de la Asunción. Y mientras, gritemos con fuerza: ¡Viva nuestro patrón San Agustín!

jueves, 26 de agosto de 2021

 CENTENARES DE VERSOS 

PARA UN ATARDECER FESTIVO

Centenares de versos revolotearon como aves mensajeras desde un recóndito y acogedor rincón de Fermoselle hacia el olimpo onírico. Cientos de versos, salidos de las entrañas del corazón de poetas fermosellanos, impregnaron de aromas líricas el XII atardecer poético. Decenas de poemas iluminaron con luz propia, durante una larga hora, el agora pulijonera preparada para ello, dejando una estela poética difuminada entre los asistentes.


Una decena de declamadores, ya veteranos, utilizaron sus propias composiciones con una maestría que dejaron ensimismados al personal amante de ese género literario congregado en la plazoleta Juan de la Encina (nunca mejor lugar con renombre, también, de un fermosellano).


Rosi, Agustín, Lumi, Manoli, Eduardo, Montero, Carmina, Luis y Antonio mostraron sus cualidades de poetas y de rapsodas. El Duero y su arribanzo, las calles y rincones de Fermoselle, los diferentes aspectos que conforman las fiestas patronales, las bodegas, las añoranzas de tiempos pasados aparecieron incardinados en sus sentires y decires. Un auténtico espectáculo cultural fundamentado en la sabiduría popular de nuestras gentes. Un tiempo  de aprender escuchando a nuestros vecinos que nada tienen que envidiar a poetas más encumbrados. Un espacio para saborear en el silencio del entorno la cadencia rítmica de la lectura sosegada ofrecida por los intervinientes. Un momento para testimoniar nuestro más sincero agradecimiento a cuantos se acercaron hasta el Pulijón. 
 



Hubo recuerdos emocionas para los fallecidos  durante la pandemia así como para Emilio, tesorero del Pulijón.

Damos las gracias por su asistencia a  Pilo, alcalde, y a Tita, concejala de cultura, a este acto y les emplazamos (al igual que lo hemos hecho en ediciones anteriores) a la edición de un poemario en el que se recoja muestras de  las composiciones poéticas de los participantes y de otros fermosellanos, que los hay, gustosos de la estrofa y la rima.


Sonaban en el reloj de la casa consistorial las nueve campanadas  que anunciaron el momento de  echar el telón de un atardecer pleno de centenares de versos.

miércoles, 25 de agosto de 2021

 EL PULIJÓN PRO ÓRGANO PARROQUIAL

La Asociación Cultural “El Pulijón” de Fermoselle se ha adherido a la iniciativa del ayuntamiento en la que se trabaja para la recuperación y restauración del órgano existente en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción. Es una obra de mucho calado para la que se requiere un aporte económico considerable que no está al alcance de la institución local. Para que sea viable, desde hace un tiempo se buscan fórmulas para conseguir el dinero necesario para la ejecución de la restauración.


El Pulijón, con ese objetivo económico, programó dentro de la XXXVI Muestra de Música y Danza Tradicvional un concierto “pro órgano”  presentando en Fermoselle al dúo vallisoletano  ACORDUL.  Lorena, profesora de acordeón,  y Eugenio, profesor de dulzaina, ambos imparten clases en la escuela municipal de Tordesillas, se sintieron desde el principio muy satisfechos por la colaboración en el proyecto. El Pulijón, conocedores de su valía, no escatimaron esfuerzos a la hora de contratarles para formar parte de la Muestra musical.


En la iglesia parroquial, donde se celebró el concierto, se congregaron un largo centenar de personas que voluntariamente aportaron su donativo a la entrada. Varios socios se encargaron de controlar el aforo y la aplicación de las medidas sanitarias correspondientes.

Alberto, presidente de la asociación, presentó de forma breve a los dos músicos que de inmediato iniciaron su concierto. Fue Eugenio quien aclaró el respeto que se debe tener al lugar sagrado y que a pesar de ello pedía la participación del público durante alguna de sus interpretaciones. Aprovechó para alabar  el proyecto de dar nueva vida al órgano y reclamó, que una vez recuperado, es menester mantenerlo en forma a través de conciertos frecuentes.

Ya desde la primera pieza captaron la atención de los asistentes quienes aplaudieron calurosamente después de cada una. La conjunción del acordeón, la dulzaina y la chirimía, la impresionante voz de Eugenio y la sonoridad del templo se fusionaron para conseguir una actuación memorable en la villa. A destacar el Romance de Doña Juana (Juana I de Castilla) , un Canto de Boda de Agapito Marazuela y el Ave María (un solo de dulzaina).

El público salió muy satisfecho al igual que El Pulijón al haberse obtenido la nada desdeñable cantidad de 500 € que ya han sido ingresados en la cuenta dispuesta por el ayuntamiento. Damos las gracias a todos los asistentes por su apoyo desinteresado a favor de esta obra monumental y artística.

 EL FOLCLORE CALA EN FERMOSELLE

Aunque parezca altisonante y presuntuoso este titular no deja de ser una auténtica realidad. En Fermoselle se vive con intensidad  todo lo relacionado con la música y la vestimenta tradicional,   no en balde funciona y trabaja con seriedad desde el año 2000 y a pleno rendimiento la Asociación de Tamborileros “Juan de la Encina”  con las secciones de percusión y canto, de baile y la más veterana  de gaita y tamboril. 


Igualmente, el Pulijón, fiel a sus objetivos, trata desde su fundación  promocionar y potenciar nuestras raíces folclóricas con actividades diversas como concursos de tamborileros, talleres didácticos, muestras de música y bailes, entre otras. Fue en el año 1976 cuando se convocó el I Certamen de Tamborileros en el que aparece como jurado “el tío Linos” uno de los últimos tamborileros que tocó por las calles de Fermoselle. 

Siguieron dos años más  estos certámenes para pasar a denominarse Muestra de Música y Danza Tradicional. Este 2021 se cumple la trigésima sexta edición y por ellas han pasado varios de los mejores grupos y voces de Castilla y León. La Asociación “El Pulijón” fue pionera en este tipo de actividad al igual que lo ha sido en otras que han dinamizado las fiestas de la localidad.



Este mes de agosto ya se ha celebrado la primera parte en la plaza mayor siendo seguida por muchos vecinos que llenaron el aforo permitido y cumplieron responsablemente  con las normas sanitarias establecidas.  

La actuación del grupo salmantino ARRAIGO presentó en Fermoselle un programa muy variado que gustó a los asistentes. Durante hora y media recorrieron  el folclore de la comunidad, sobre todo de Zamora y Salamanca, dejando pinceladas de una calidad evidente. Bailes, brindis, panaderas, fandangos, cantos, romances constituyeron un racimo del amplio repertorio de esta agrupación. 

Conviene destacar la riqueza de su vestimenta tradicional, sobre todo el de las mujeres, con hechuras perfectas y con bordados multicolores cargados de  una riqueza de abalorios y pedrería que encendían la visión de los espectadores..

Resumiendo, Arraigo es capaz de magnificar lo sencillo.

lunes, 23 de agosto de 2021

 ALBORADA DE LOS TAMBORILEROS

“JUAN DE LA ENCINA”

El “Domingo de Toros” fue el elegido por la asociación fermosellana para endulzar el día, musicalmente hablando. El centro de reunión se realizó junto a la casa consistorial donde, sonando las nueve de la mañana, interpretaron unas piezas de calentamiento para la brega que les esperaba. 


Ya compuesto el grupo de tamborileros, pandereteras y dulzainero iniciaron su pasacalles con la típica diana del “levántate morenita” y “quinto levanta” recibidas por agradecidos aplausos de quienes se encontraban a esa hora tempranera desayunando en las terrazas del punto neurálgico de la villa, como es su plaza mayor.


El recorrido continuó por la Plaza Vieja, las Eras, la rotonda del Águila, las Cuatro Calles y la Plazuela. Parada especial en esta plazoleta donde se aprovechó para reponer fuerzas en el bar de la zona alta del pueblo y para sacar la foto “oficial” de los músicos. Alternando tamborileros con dulzainero desgranaron una serie de piezas “pachangueras” y otras tradicionales que invitaban a que las ventanas y balcones se abrieran para recibier ese aliento de alegría y fiesta que falta desde el comienzo de la pandemia. 


El paso bajo el Arco, donde resuenan con fuerza los instrumentos de viento y percusión, dio un toque especial al cortejo que toma con energía la bajada hacia la plaza. A medio descenso hubo tiempo para una parada “técnica” en el bar España donde nos esperaba Mery, con sus famosos y estupendos periquillos artesanos y una copita de licor café, igualmente casero. 


No faltó el canto de la Coronela, himno taurino de las gentes de Fermoselle, que en esta ocasión se dedicó a la memoria de Antonio, esposo de Meri, recientemente fallecido. De aquí a la plaza, al ritmo de una conocida  tarantela, casi se daba por finalizada esta alborada espontánea que la asociación de Tamborileros “Juan de la Encina” ha ofrecido a su pueblo con un mensaje claro de que la vida sigue y que se debe de disponer de ratos para la diversión y la desconexión de los problemas diarios. 

Ya en la plaza mayor y tras dos horas de “música y canciones populares” se interpretaron otro par de piezas que fueron grabadas por las gentes que en ella departían tiempo de ocio y que canturrearon a su manera.

Desde el Pulijón, deseamos larga vida a este grupo de tamborileros para que continúen colaborando en pro de las mejoras de nuestro Fermoselle.