martes, 29 de septiembre de 2015

FERMOSELLE VIVE SU VENDIMIA
Fermoselle huele a mosto. Recorriendo sus calles durante estos días todo nos habla de vendimia. Los vecinos propietarios del viñedo, su mayor parte en minifundio, han iniciado el acarreo desde los bancales situados a la caída del Duero y Tormes para posteriormente finiquitar con la cosecha situada en la parte alta del municipio, siempre algo más tardío. Lo habitual es que ante la falta de mano de obra se asocien grupos de familiares o de amigos para utilizando el sistema de ayuda mutua ejecutar con más facilidad y celeridad la vendimia que se sigue realizando de forma tradicional, es decir, manualmente con el corvillo, directamente en contacto con las cepas. Desde el amanecer hasta la puesta de sol se trabaja en una faena harto dura, pero que los vendimiadores la desarrollan con entusiasmo entre cánticos y chascarrillos haciéndola un tanto festiva. Sólo se descansa para “echar las diez” y para comer, siempre en agradable camaradería,
Las bodegas, tanto privadas como la cooperativa, cumplen con el rito de la recogida del fruto, unas veces de cosecha propia y otras, las más, de la que aportan los viticultores follacos y que posteriormente se transformará en los apreciados vinos con D. O. Arribes en sus tres variedades de blanco, clarete o rosado y tinto. Lo mismo han hecho el resto de bodegas no acogidas a la denominación y ¡cómo no! las de “solera”, las de siempre. Las que continúan elaborando sus caldos a la “antigua usanza” (Roberto, Fioravanti, Agustín, Ismael, Ángel, Tomás, entre otros) en sus bodegas-cuevas que configuran el subsuelo de Fermoselle. Estos no tienen enólogos, pero aplican la sabiduría heredada de sus mayores y la experiencia propia adquirida en sus ya muchos años de bodegueros.
También la  Casa del Parque ha querido hacerse presente en este “festival de la vendimia”. Julia Sendín, Monitora de la Casa del Parque, ha presentado la iniciativa con estas palabras: “Queremos reivindicar la importancia del viñedo de Arribes del Duero para la socio-economía local y la conservación del paisaje tradicional, el patrimonio cultural y la biodiversidad. Para ello, hemos elegido la época de la vendimia, uno de los momentos del año más importantes para esta tierra, cuando las viñas amarillas y rojas, con las uvas en sazón, embellecen aún más el entorno de los pueblos arribeños.
Para celebrar el comienzo de la Vendimia en Arribes del Duero, hemos elaborado este programa de actividades para la tarde del sábado 26 de septiembre,  que busca instruir, deleitando y disfrutando de la visita a una imponente bodega tradicional fermosellana (El Pulijón), del precioso viaje musical entre España y Portugal al que nos invitan los miembros de "Cantigas aos Domingos" y de los saberes de viñedos y vinos del enólogo Carlos Capilla.

Pues lo dicho, Fermoselle huele a mosto porque se encuentra en plena vendimia y sus gentes lo celebran, un año más, como si de una fiesta se tratara. Lo podéis comprobar in situ visitando la villa arribeña por excelencia.
Desde el Pulijón, que colaboró desinteresadamente en esta actividad, valoramos con nota máxima iniciativas como estas que sirven para dar a conocer a Fermoselle, sus gentes, sus costumbres y todo su encanto paisajístico, cultural y gastronómico.
 Agradecemos a Sara la cesión de algunas de las fotos.

2 comentarios:

lalueza.blogspot.com dijo...

Paisanos que tengáis buena vemdimia

lalueza.blogspot.com dijo...

Paisanos que tengáis buena vemdimia