VISITA GRATUITAMENTE LAS BODEGAS HISTÓRICAS DEL PULIJÓN

Las bodegas situadas  en el subsuelo del domicilio social de la Asociación Cultural El Pulijón en la calle Juan de la Encina continúan acaparando la atención de muchos de los visitantes que se acercan a nuestro pueblo con el objetivo de conocer estas antiquísimas construcciones que tanta importancia tuvieron en la vida de aquellos fermosellanos que subsistían de la agricultura y ganadería minifundista de la época.

Independientemente de los grupos organizados por la AECT Duero-Douro, en las últimas semanas han visitado nuestras bodegas el Sr. Obispo de Zamora durante su visita pastoral a los fieles de la parroquia. También lo  han hecho una pequeña parte del equipo, por cierto muy numeroso, de decoración de la serie de televisión “MATICES” que se rueda en la Hacienda Unamuno. 

Igualmente pasaron por estos tesoros subterráneos los participantes en las visitas gratuitas por los pueblos más bellos de la provincia dentro del programa “DÉJATE LLEVAR POR ZAMORA” y organizado por el Patronato de Turismo de la diputación zamorana. 

Por último recordar al alumnado y profesotado del agrupamento de escolas de Miranda do Douro a través de la marca “Fermoselle Villa del Vino”.

Nos sentimos satisfechos  de que nuestras bodegas musealizadas puedan ser contempladas y muy positivamente evaluadas por tantos visitantes, lo que nos anima a seguir ofreciéndolas como punto turístico.

Recordamos que pueden ser visitadas gratuitamente si lo hacen acompañados por algún socio.

 YA TENEMOS CARTEL DE FIESTAS 2024

Nos encaminamos irremediablemente y con cierta rapidez hacia las fiestas patronales de Fermoselle del presente año. Y para que no se les olvide y refrescarle la situación a los más despistados, el consistorio nos lo ha recordado con el lanzamiento a través de las redes sociales del cartel de fiestas 2024 (que no la programación que eso será el 1 de agosto coincidiendo con el toque de la Campana Torera). El cartel es obra del pintor y profesor madrileño Antonio Varas de la Rosa afincado en Béjar y Salamanca.

La pintura nos presenta en lugar preeminente y ocupando casi la totalidad del lienzo en su parte central una escena de los típicos encierros fermosellanos una vez pasado el arco medieval con  balconada abierta a dos caras que da entrada al casco antiguamente amurallado. Se puede considerar a este punto del Arco como uno de los momentos con más atractivo del recorrido. Aquí, entre el griterío de los asistentes, el resuello de los astados junto al ruido metálico emitido por las pezuñas de la manada al galope enervan los ánimos y los latidos del corazón de los corredores que a tumba abierta se lanzan calle abajo con la intención de llegar intactos al coso de madera. ¡¡Bella estampa armonizada por caballistas con  garrocha en ristre, cabestros y novillos!!

También se contempla en la pintura el aspecto religioso sobre el que gravita parte de la fiesta. En el ángulo superior derecho, como si de una atalaya se tratara, los dos patrones hacen de vigías salvadores. Por un lado, San Agustín, al que le cabe el honor de ser el  patrón de las fiestas, y junto a él la Virgen de la Bandera, madre y protectora de todos los fermosellanos.

Llama la atención la pareja de jóvenes aguerridos que “tiran” de la torada sin muestra de preocupación mientras el primer toro babea intentando alcanzar a la mujer que permanece un tanto en equilibrio estático con las gafas en la mano y sin perder de vista al morlaco, al contrario de su compañero que se bate en  carrera con zancada apremiante con la mirada al frente. Además, ambos hacen honor a la llamada  cuota de paridad de género que tanto gusta utilizarla hoy día.

A la derecha un grupo de aficionados citan a los animales mientras que alguno se aplica en inmortalizar la escena con la cámara de su móvil como recuerdo para el futuro. Tal vez hubiese sido más real colocarlos sobre un cañizo o un carro.

Como digo, buen cartel que expele fermosellanismo festivo por los cuatro costados. La peña El Pulijón felicita al creador de esta obra y valora positivamente su trabajo en el que en pocos centímetros cuadrados compendia varios de los símbolos festivos de las fiestas de San Agustín.

Felices días.

(Fuente fotos: Ayuntamiento de Fermoselle)

 UNA GRAN PEÑA

(REVISTA 50 ANIVERSARIO)

Decía en el post anterior que la Asociación “El  Pulijón” es un gran grupo, pero no nos quedamos en ello. Es un gran grupo acostumbrado a vivir entre actividades que le dan un tinte especial y que le llevan a transformarse en una sociedad y peña que cumple con los objetivos marcados en sus estatutos.

Y es una gran peña que desde el primer minuto de su fundación se propuso trabajar para animar a los vecinos de Fermoselle. No han faltado actividades culturales, deportivas, literarias, taurinas, medioambientales, gastronómicas, musicales, de ocio, entre otras y siempre dirigidas a todos los públicos, sin excepción.

Si recorremos los álbumes de fotos que se conservan en su sede se pueden observar una infinidad de situaciones que hablan del trabajo desarrollado durante tantos años y la sintonía existente entre las diferentes secciones que se han encargado de dirigirlas.

Pero también es una agrupación que mantiene el espíritu peñero en cada momento de las fiestas patronales, acogiendo a cuantos se adentran en su domicilio social para conocer el funcionamiento y el carisma que les distingue de las demás.

No lo negamos. Creemos en ello. El Pulijón es la casa común de aquellos que han confiado en este proyecto asociativo. Es el lugar de encuentro donde confluyen tantos fermosellanos de la diáspora que llegado el mes de agosto retornan a su patria chica.  Es el espacio donde se reúnen varias generaciones, familias completas, para disfrutar de la fiesta, de la gastronomía, de los pasacalles, de los ratos de asueto tan necesarios en estos tiempos tan llenos de preocupaciones

Así se consigue y se mantiene esta GAN PEÑA conocida como “EL PULIJÓN”.