LA FARMACIA CAMBIA DE UBICACIÓN
Calle Subida
a Santa Colomba, nº 86 (antigua Sanjurjo). Sobre la fachada correspondiente a
este número aparece una placa que reza: “Bernardo Rubio González. Licenciado en
Farmacia”. Efectivamente, estamos hablando del farmacéutico de Fermoselle que
ha cambiado de ubicación su lugar de trabajo.
Lejano nos
queda aquel año de 1.962 cuando D. Gabriel Rubio Carretero llegó a Fermoselle
para regentar la botica que hasta entonces había estado a nombre del “licenciado
J. Bueno”. El lugar elegido fue una vivienda de la calle Requejo 101 que la
transformó en su totalidad destinando la planta baja a los servicios de farmacia.
Ahí se dedicó a expender y atender a fermosellanos, sayagueses e incluso
portugueses y a cuantos requirieron información y consejos relacionados con su
especialidad.
Ahora es su
hijo Bernardo, “Nano” para los conocidos, quien desde el año 2.001 ha
continuado con la labor emprendida por su padre. Y lo hace magníficamente bien
con un trato cercano, lleno de profesionalidad y siempre dispuesto a colaborar
en todo aquello que tenga relación con Fermoselle. Somos sabedores del profundo
amor que tiene a esta tierra y a sus gentes poniéndolo de manifiesto en cuanto
se le presenta cualquier oportunidad para ello.
Desde el pasado
8 de junio de 2.015 presta sus servicios en su nueva ubicación. El edificio,
con fachada de piedra de cantería, es un bello ejemplo de las construcciones
que tanto abundan en Fermoselle y que tanto impresionan a los visitantes que
pasean por la villa. Es una casa del año 1.925, antigua barbería de Marcelino “Barbero”,
que se ha rehabilitado su exterior respetando la estructura original y acondicionado
su interior (de la planta baja) a los servicios de farmacia. El espacio
dedicado a la recepción de los usuarios es amplio, la rebotica en la parte
posterior ofrece facilidades para su trabajo y la decoración, junto al
mobiliario, presentan una agradable sensación a la vista. 
Merece la pena
contemplar la colección de frascos y tarros, botes y ampollas, orzas y albarelos
ricamente decorados y vistosos que reposan en vitrinas colgadas del techo.
Desde nuestra
asociación, a la que pertenecen como socios toda la familia, le deseamos mucha
suerte en esta nueva etapa que inician en la Subida a Santa Colomba, nº 86.
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